dilluns, 3 de novembre del 2008

Amor y pedagogía ( I )


Comentario de un fragmento del capítulo XIV


Llaman a la puerta, manda entrar, y entra don Avito.

- Tenemos que hablar, Apolodoro.
- Tú dirás.
- Observo en ti desde hace algún tiempo algo extraño y que cada vez responde menos a mis esperanzas.
- No haberlas concebido.
- No las concebí yo, sino la ciencia.
- ¿La ciencia?
- La ciencia, sí, a la que te debes y nos debemos todos.
- Y para qué quiero la ciencia si no me hace feliz?
- No te engendré ni crié para que fueses feliz.
- ¡Ah!
- No te he hecho para ti mismo.
- Entonces, ¿para quién?
- ¡Para la Humanidad!
- ¿La Humanidad? ¿Y quién es esa señora?
- No sé si tenemos o no derecho a la felicidad propia.
- ¿Derecho? Pero sí destruir la ajena, la de los hijos sobre todo.
- ¿Y quién te ha mandado enamorarte?
- ¿Quién? El Amor, o si quieres el determinismo psíquico, ese que me has enseñado.

Amor y Pedagogía es una novela publicada en 1902 por Miguel de Unamuno. Esta novela nos cuenta la historia de don Avito para crear un genio, su hijo, basándose en la pedagogía moderna.

Analizaremos este fragmento para ver un poco cómo es el comportamiento del padre y la reacción del hijo.

Don Avito (el padre) entra en la habitación de Apolodoro (su hijo), para hablar con él.
Don Avito le comenta que últimamente tiene un comportamiento extraño y que no responde a sus expectativas. Apolodoro le recrima sus expectativas.
El padre enseña a su hijo desde un punto de vista científico y pedagógico. Apolodoro está en desacuerdo con este método porque no le hace feliz. Don Avito le contesta que él lo ha engendrado para la Humanidad no para él mismo.
Don Avito lo que quiere es que su hijo sea un tipo culto, inteligente como el que más, pero Apolodoro le ha surgido un problema, el amor. El padre cree que el amor es una distracción para su formación.

El padre se olvida de una cosa muy importante, su hijo. Lo trata como un objeto de aprender, no como un ser humano. En los hombres/niños es muy importante tener una relación social que te ayuda aprender varios aspectos de la vida misma. El saber es importante pero en un término medio entre lo sociable y el saber. Don Avito no trata a su hijo tal como es, lo trata como él quiere que sea, no tiene en cuenta la formación como persona de Apolodoro. Una de las cosas más importantes es aprender como persona primero y después aprender otras cosas.